TCM: un hito de infraestructura en el Caribe
Redacción La República [email protected] | Miércoles 26 octubre, 2016
Sobre la isla artificial que hoy se yergue en la costa del Caribe limonense, toma forma un proyecto sin precedentes en la historia de Costa Rica. La Terminal de Contenedores Moín (TCM) promete convertirse en la terminal más eficiente y moderna de Latinoamérica.
Esta obra —con una inversión de $1.000 millones y a cargo de la multinacional APM Terminals— es el mayor hito de infraestructura privada del país y un portento ingenieril que reta la imaginación por la complejidad involucrada en su construcción.
Un recorrido al estado actual de la construcción —que ya supera el 45% de la totalidad de tareas implicadas— habla estentóreamente de la envergadura de la nueva terminal.
La isla artificial ya sobresale como una porción de 35 hectáreas de territorio añadido a la costa (en su primera etapa llegará a tener 40 hectáreas). Una empresa de tales proporciones ha requerido miles de X-blocks (grandes estructuras de concreto similares a las matatenas o jackses del juego infantil), millones de metros cúbicos de arena y otros tantos de piedra.
“A pesar de nuestras costas, Costa Rica tiene pocas obras de este tipo. Hasta ahora, Moín y Limón eran dos de nuestras mayores obras marítimas, pero la TCM está a otra escala”, señala Rodrigo Arrea, ingeniero civil a cargo de la obra.
Sus desarrolladores tienen claro lo que la TCM implica para la provincia, para el país y también para la región centroamericana. Se toman en serio un desarrollo del cual se esperan cuantiosos beneficios en términos de comercio, encadenamientos empresariales y empleos directos e indirectos.
Según explica el Director General de APM Terminals, Kenneth Waugh, esta terminal es una obra de vanguardia, construida bajo los más altos estándares de calidad y tecnología. “Una vez que entre en funcionamiento, la TCM atenderá buques tipo Post-Panamax,de hasta 8.500 TEU cada uno. La atención de barcos más grandes, incrementará la actividad naviera del país, generando más encadenamientos y trabajos para Limón”, enfatiza Waugh.
Actualmente este proyecto se encuentra en la primera fase, que implica la construcción de los dos primeros puestos de atraque, así como la mencionada isla artificial. En su estado actual, ya es posible admirar las inmensas proporciones que tendrá el proyecto una vez levantado por completo. Para las siguientes etapas se construirán el tercer puesto de atraque y una porción de 40 hectáreas más, con lo cual se completarían las 80 hectáreas totales de la terminal.
- Impacto de TCM se potenciaría con mejora de la red vial, establecimiento de un plan regulador municipal, mejora en gestión del recurso hídrico, construcción de terminal para cruceros, refuerzo en seguridad ciudadana y desarrollo de una zona libre.