Seis bancos nacionales sufren rebaja en la nota de riesgo
Tatiana Gutiérrez Wa-Chong [email protected] | Viernes 27 enero, 2017 03:54 p. m.
La firma calificadora de riesgo Fitch Ratings rebajó la nota de riesgo para seis bancos nacionales. Estos son: Bac San José, Davivienda, Banco de Costa Rica, Banco Internacional de Costa Rica, Banco Nacional de Costa Rica y Banco Popular y de Desarrollo Comunal.
Esto trasciende una semana después de que la firma rebajara la calificación de riesgo de largo plazo en moneda extranjera y local, de la deuda soberana de Costa Rica a BB de BB+.
El documento de Fitch especifica que “las calificaciones a escala nacional de estas y otras instituciones financieras en Costa Rica no se ven afectadas, ya que las calificaciones nacionales son credibilidad dentro de una jurisdicción particular y toma en cuenta las fortalezas relativas y las debilidades de cada banco permanecen sin cambios".
¿Qué se dice de cada una de las entidades financieras?
BAC San José
Está limitada por su entorno operativo y el riesgo crece por un balance altamente dolarizado. Costos operativos y crediticios adecuados. Calidad de los activos. Adecuada capitalización y una base de depósitos amplia.
BICSA
Refleja su alta concentración de recursos financieros y menor flexibilidad financiera en comparación con sus pares. Una disminución de la percepción de la eficacia de la gobernanza corporativa. La calificación también considera rentabilidad moderada del banco.
Davivienda Costa Rica
Refleja la moderada rentabilidad del banco y una buena financiación y liquidez. Además, considera el buen crédito del banco y calidad y posición de capital moderada.
BNCR y BCR
Consistente calidad de los activos, mejorando la rentabilidad y capitalización moderada.
Están muy influenciados por las calificaciones soberanas. Depósitos amplios y diversificados.
Banco Popular y de Desarrollo Comunal
Refleja la alta influencia del entorno operativo. La naturaleza pública del banco. Los beneficios otorgados por la ley. La amplia capacidad de absorción de pérdidas y una rentabilidad consistente. La calidad de los activos y un amplio financiamiento basado en depósitos.