Reforma fiscal en peligro por exceso de diálogo
Tatiana Gutiérrez Wa-Chong [email protected] | Jueves 03 mayo, 2018
La pretensión de los nuevos diputados de empezar desde cero el debate sobre la reforma fiscal, pondría en riesgo la aprobación de los nuevos impuestos y la contención del gasto que pretende el gobierno de Carlos Alvarado.
Y es que no solo existe incertidumbre sobre la validez de aprobar una moción para extender el plazo de discusión hasta por seis meses, sino que al abrir el debate a todos los sectores de nuevo, pone en riesgo que legisladores y otros actores traten de entorpecer el avance de la iniciativa.
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En estos momentos, la Ley de Responsabilidad Fiscal está cerca de pasar al Plenario para sus etapas finales, gracias a la labor de la anterior Asamblea Legislativa.
Por el contrario, los nuevos legisladores pretenden conformar una comisión especial que les permita volver a presentar mociones al proyecto.
Asimismo, los sectores afectados tendrían la posibilidad de ser convocados a dicho foro legislativo para dar su opinión.
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Sería la primera vez en la historia que se presente esta situación y existe temor de que la modificación de la vía rápida se convierta en causal de ilegalidad.
Por otra parte, los nuevos legisladores podrían verse doblegados por los sindicatos y empleados públicos, quienes exigen el retiro del proyecto fiscal, por considerar que la propuesta actual recorta sus incentivos.
“Esta legislatura no debe ser tan irresponsable como la anterior, ni como el gobierno pasado, que entró negando que existiera un problema fiscal, mintiéndole a la gente y desperdiciando dos años. Queremos un gobierno y diputados que trabajen más y hablen menos”, destacó Carlos Ricardo Benavides, diputado del PLN.
El verdiblanco está de acuerdo en abrir un espacio de discusión para que los nuevos congresistas hagan su aporte a la reforma fiscal, no obstante, señala que debe ser limitado.
En ese sentido, aboga por dos días de mociones de fondo y una semana en comisión y no los seis meses que ha propuesto Carolina Hidalgo, diputada del PAC y nueva Presidenta del Congreso.
El tiempo continúa como uno de los principales enemigos de la reforma fiscal ya que la transición deja varias semanas de atraso, y se deben instalar las comisiones, eso se llevará todo mayo, por lo que la discusión podría retomarse en junio o julio.
Sin embargo, la nueva presidenta del Congreso es optimista y dijo que esperaba que sea aprobada en octubre.
“Esperamos que las fracciones sean responsables y que se busque la manera de cambiar la vía rápida. Hay bastante conciencia sobre la necesidad de esta enmienda”, aseguró Hidalgo.
El actual proyecto fiscal al que los diputados le harán “borrón y cuenta nueva” consta de cuatro pilares: cambios al impuesto de valor agregado, renta, empleo público y regla fiscal.
Otras fracciones
Las bancadas esperan un cambio al procedimiento de vía rápida para presentar mociones y modificar lo que no les parece y que dejó la legislatura pasada.
Jonathan Prendas
Diputado
Restauración Nacional
El futuro del plan depende de que tengamos espacio para enderezar su rumbo, pues en este momento presenta más dudas que el compromiso de bienestar social; así como está no puede ser aprobado. No estamos de acuerdo con que se graven la educación, la salud, las medicinas y tenemos dudas del 2% sobre la canasta básica.
José María Villalta
Diputado
Frente Amplio
Consideramos que debe revisarse. Modificar el procedimiento especial (208 bis) para abrir un nuevo periodo para introducir cambios a dicho proyecto, a fin de corregir cosas que están mal como el impuesto a la canasta básica. Así como está no le veo viabilidad.
Pablo Heriberto Abarca
Diputado
Unidad Socialcristiana
Hay votos suficientes como para impulsar los cambios y no dar por perdida su pelea para un recorte al gasto público. Es necesario hacer una revisión exhaustiva del proyecto y ser vigilantes para que se contenga el gasto porque de lo contrario, no tendríamos autoridad moral para pedir más dinero.
Proyecto actual
Los principales cambios se incorporan a IVA y renta
IVA
-Se crea una tarifa del 2% para canasta básica y productos e insumos utilizados por el agro y ciertas materias primas e insumos como el trigo, el frijol de soya y el sorgo
-Los servicios de salud privada con un 4%
-Medicamentos, alrededor del 4%
-Para los casinos la base imponible será el 60% de un salario base por cada mesa de juego y el 10% de un salario base por cada máquina tragamonedas, liquidable mensualmente
-La compra de boletos o pasajes aéreos queda igual con tarifa reducida del 4%
Renta
-Se globalizan las rentas de las entidades financieras y se permite para los bancos la deducibilidad de reservas y provisiones aprobadas por los entes reguladores
-Se crean nuevos tramos, más favorables con un tipo máximo del 20% para pymes inscritas
-Se crean dos nuevos tramos de gravamen del impuesto al salario del 20% y el 25% para salarios mayores a ¢2.103.000
Fuente: Hacienda