Por la puerta dorada
Luis Fernado Rojas [email protected] | Miércoles 14 agosto, 2013
Por la puerta dorada
Isinbáyeva se despide con medalla de oro, ante un estadio casi lleno
Con la gloria de un tercer título mundial y la sonrisa de una reina que prácticamente conquistó todo lo que quiso y pudo en su disciplina, la rusa Yelena Isinbáyeva obtuvo ayer la medalla de oro de pértiga y dijo adiós a esta disciplina, dejando, no obstante, un portillo abierto para un eventual retorno.
“La Zarina” se despidió con un salto ganador de 4,89 m y tras el tercer salto sin poder pasar la vara, Isinbáyeva fue hasta la tribuna, buscó la bandera rusa y salió a dar la vuelta olímpica. Fue un final soñado por la rusa sumando un título a los que ya había obtenido en Helsinki 2005 y Osaka 2007 además de los bicampeonatos olímpicos de Atenas 2004 y Pekín 2008.
A sus 31 años, la gran pregunta acerca de Isinbáyeva es si ¿ayer fue la última vez que la vimos en competencia, o este adiós será temporal, mientras ella cumple su anhelo de ser madre? Sus palabras dejaron un portillo: “No pienso sobre el final de mi carrera porque soy géminis. Los géminis cambian de opinión muy fácilmente”, dijo.
Isinbáyeva cierra un ciclo dorado para el atletismo ruso, en concreto para la pértiga. Ha sido una digna sucesora del mítico Sergei Bubka y su leyenda ya es inmortal. Ha tenido su revancha consigo misma y esa es la que sabe mejor. Lástima que no haya cerrado su carrera con un nuevo récord, pero ese 5,06 con el que se va será muy difícil de superar.
*Se tomó información de EFE
Luis Rojas y EFE
[email protected]