Mitos y Realidades de los Eurobonos
Jorge Patiño [email protected] | Lunes 03 octubre, 2022
En las últimas semanas he visto con preocupación lo que ha estado aconteciendo en torno a la discusión política sobre la conveniencia o no de aprobar un programa de endeudamiento externo mediante la figura de eurobonos (bonos emitidos en dólares en mercados internaciones), preocupa el giro que se le ha querido dar a este tema y como algunos partidos políticos puedan usar esta negociación como moneda de cambio para llevar agua a sus molinos, por esta razón creo importante expresar la opinión como ciudadano informado del tema técnico financiero y aclarar algunos mitos y realidades en torno a los Eurobonos que consideramos importantes.
- Si no se colocan los eurobonos estaríamos enfrentando un default: No, el monto que vence es de $1,000 millones de dólares, el Ministerio de Hacienda tiene suficiente liquidez y capacidad para conseguir con captaciones en el mercado local la diferencia que le haga falta. Ya hay $500 millones disponibles y viene el siguiente desembolso del FMI por aproximadamente $260 millones. Adicionalmente vienen dos desembolsos por parte del Banco Mundial y el BID que suman $500 millones para apoyo presupuestario. No es un tema de urgencia o de riesgo de Default, es un tema sobre el costo de financiar esa deuda que necesita ser renovada sí o sí.
Si se financia localmente tendría un efecto en el costo de la deuda, ya tendría que reconocer tasas de interés sustancialmente más altas, estimo que este aumento podría ser entre 200 y 250 puntos base (2%-2.50%) dependiendo del o los plazos a los que se decida finalmente colocar los nuevos bonos en el mercado local. Para poner esto en contexto, podría implicar entre $30 y $37.5 millones de dólares más al año en gastos por intereses que tendría que asumir el Ministerio de Hacienda. En un bono a 10 años, representaría un costo total acumulado de al menos $300 millones.
- Se puede o debe autorizar la Eurobonos sólo si el Gobierno cumple con hitos o metas fiscales: Así está definido, el Gobierno debe cumplir con las metas acordadas con el Fondo Monetario Internacional, incluso ya el Ministerio de Hacienda está intentando comprometerse con objetivos más agresivos para poder llegar a la razón de Deuda a PB del 50% antes del 2031 que es el objetivo final.
- Autorizar los Eurobonos es dejar al país más endeudado: No, esta emisión no es deuda nueva, es el endeudamiento que ya está autorizado para el próximo año. Los siguientes años se tiene que autorizar para así poder pagar deuda ya existente a través del presupuesto nacional. El control político se debe usar en la discusión del presupuesto.
- Los $6mil se usarían todos de un solo, en un mismo año: Negativo, se emitirían en tractos de $1,500millones por año según se tengan vencimientos. En el 2023, 2024 y 2025 las necesidades de financiamientos son superiores al monto de $1,500millones. La intención de autorizar desde ya el monto de $6.000 millones de dólares es darle al Gobierno la posibilidad de hacer una adecuada planificación financiera desde hoy, sabiendo que puede contar con financiamiento externo en sus flujos de caja para atender los vencimientos futuros y el gasto corriente. Además, permite al Gobierno enfocar su tiempo y recursos en temas relacionados al desarrollo y crecimiento del país ya que no tendrá que estar cada año gastando tiempo en discusiones con la Asamblea para obtener permiso para colocar deuda externa, es un tema de eficiencia en el uso del tiempo y recursos del país.
- Autorizarlos es darle carta blanca al Gobierno para ampliar el gasto: Falso, el nivel de gasto del Gobierno es definido todos los años mediante la aprobación del presupuesto nacional por parte de la Asamblea Legislativa quien ejerciendo el control político decide si aprueba, rechaza o modifica dicho presupuesto.
Definir la plaza o dónde emitir la deuda, ya sea en mercado local o en los mercados financieros globales, debería ser el resultado del análisis técnico y no político, debe privar el interés y beneficio de todos los costarricenses que somos los que al final pagamos la deuda, hay que tener especial cuidado que este tema no sea politizado, ni sea utilizado como moneda de negociación por las diferentes agrupaciones políticas.
- Sale más caro emitir afuera que localmente: Absolutamente falso, en los mercados internacionales hay abundancia de recursos financieros en busca de buenas opciones de inversión, al tener una mayor cantidad de dinero disponible los rendimientos que piden esos inversionistas por su dinero suelen ser menores. Recordemos que el Gobierno no es el único que compite por recursos localmente, también están los bancos, cooperativas y empresas, entre otros. Si un solo jugador capta un monto tan importante de recursos, obligaría a los demás a subir sus tasas de interés pasivas, consecuentemente desacelera la economía y restringe el gasto privado.
Aprobando los 6,000 millones, estaríamos asegurándole al mercado internacional que Costa Rica tiene resuelto el repago de la deuda hasta el 2026, lo cual es muy beneficioso ya que las calificadoras de riesgo tendrían menos dudas sobre la capacidad de pago del país y muy probablemente tendría un peso positivo en nuestra calificación de riesgo.
Adicional a todos estos beneficios mencionados anteriormente, cabe destacar que el plazo promedio de la deuda local es en promedio 5 años mientras que en el mercado internacional es de poco más de 11 años. Alargar la deuda nos beneficia a TODOS los ticos al disminuir la presión anual de emitir deuda con el riesgo que esto conlleva a que en algún año la liquidez local o internacional se complique seriamente.
Las calificadoras de riesgo, lo que más recalcan del porque tenemos una B y no la BB, (incluso he leído que algunos analistas de bancos internacionales nos asignan hasta un BBB por nuestras cifras fiscales), es precisamente lo complicado de lograr acuerdos políticos.
Hay tantas razones del porqué autorizarlos, que no hacerlo, le saldrá carísimo a los responsables de votar en contra.
¿se imagina usted teniendo que ir todos años al banco para que le renueven un crédito bancario, teniendo que presentar toda la documentación contable y financiera y pasar por los comités de créditos? ¿Es esto eficiente para un país?