Mercado de la vivienda comienza a resucitar
Oscar Rodriguez [email protected] | Lunes 18 abril, 2011
Aumentan colocación de crédito y construcción habitacional
Mercado de la vivienda comienza a resucitar
Empresas reactivan negocio que moverá $6.700 millones en préstamos en 2015
La industria de la construcción y venta de viviendas retoma el crecimiento, tras el periodo de reducción económica.
Los datos del mercado son halagüeños. Durante el primer trimestre del año, aumentó un 5% el número de metros cuadrados destinado a la edificación habitacional.
En el caso del crédito, el sistema bancario incrementó un 6,3% el dinero prestado, a enero pasado.
En total, hay $4.460 millones colocados en empréstitos para la adquisición de viviendas.
El sector de mayor crecimiento, en los últimos tres años, es el de condominios y apartamentos dirigidos, principalmente, a grupos con poder adquisitivo medio alto y alto.
Solo en 2010, el Instituto Nacional de Estadística y Censos reportó un aumento del 40% en el número de viviendas de este tipo ocupadas, al superar las 60 mil.
Estos resultados no son pasajeros. Las proyecciones auguran mejores tiempos a la industria.
La razón es que en el país hay un déficit habitacional que llegará a 212 mil unidades en 2015.
Los bonos de vivienda, dirigidos a los estratos bajos de la población, representarán solo un 7%.
El 80% de las adquisiciones futuras, estima el Ministerio de Vivienda, sería cubierto mediante créditos, impulsando el mercado a los $6.700 millones. Este monto significa más de 170 mil operaciones crediticias.
En el caso del subsidio estatal para la vivienda, en los próximos cuatro años, la inversión ascendería a $230 millones. Casi 16 mil familias contarían con vivienda propia, mediante este sistema.
El crecimiento de la oferta crediticia junto con la inversión estatal son los principales motores de recuperación para el sector.
Los bancos comerciales estatales son los principales responsables de la mejora, con la puesta en marcha de nuevos productos financieros.
El atractivo para la conquista de clientes es que la tasa para los préstamos, actualmente, es en promedio de un 10%. En el caso de las instituciones privadas ronda el 18%.
Las entidades públicas proyectan prestar, en 2011 casi $800 millones. Mucho de este dinero será dado a las clases media y media alta.
Las desarrolladoras confirman el repunte del sector. La preventa de los proyectos es más dinámica y los planes de ampliación continúan.
“Las colocaciones de viviendas han mejorado porque los bancos están más dinámicos, ofrecen tasas más bajas y los clientes tienen mayor disposición para comprar”, comenta Alejandra Baeza, gerente Comercial y Ventas Grupo Constructor Nueva Era.
El Valle Central concentra el mayor número de desarrollos. El Colegio Federado de Ingenieros y de Arquitectos reporta más dinamismo durante el primer trimestre en San José, Alajuela y Heredia.
Hogares de Costa Rica ejemplifica perfectamente estas características. En la capital desarrolla dos torres de apartamentos, un condominio y un edificio de oficinas. Mientras que en los otros dos sitios está con urbanizaciones.
“El país está urgido de medidas que ayuden a las personas de ingresos medios y bajos a tener su vivienda”, enfatiza Diana Escobar, gerente comercial de la compañía.
Precisamente es a este nicho al cual, desde hace un año, proyecta satisfacer Cementos Mexicanos (Cemex).
El modelo de esta compañía busca disminuir la carencia de viviendas en el país, pues utiliza una estructura de moldes de concreto de bajo costo.
Este método permite tener una casa construida en cuatro días. La firma edifica con esta metodología el proyecto La Campiña, en Cartago, que tiene el respaldo estatal.
Cemex ha invertido en estos desarrollos $140 millones en Latinoamérica. La empresa rechaza la creencia de que las clases bajas carecen de recursos para adquirir casa. “Una persona que busca una vivienda de interés social, las encuentra con un precio que va entre $25 mil y $30 mil y otras desde $120 mil. Las familias están en una posición complicada”, explica María José Velázquez, gerente de Vivienda Cemex Centroamérica.
El Grupo Roble también posee planes a bajo precio en El Salvador y Panamá.
En suelo salvadoreño tiene casas desde $15 mil, dirigidas a familias con ingresos mensuales de $365.
Para la clase media tiene viviendas con salida al mercado a partir de $65 mil. Por ahora, la compañía no tiene previsto realizar este tipo de trabajos en el país.
Las compañías del sector coinciden en que el mercado nacional tiene que diversificar los productos.
Con esta medida, reactivará no solo el negocio del ladrillo, sino que permitirá a miles de familias de ingresos medios acceder a
soluciones habitacionales.
Oscar Rodríguez
[email protected]
Mercado de la vivienda comienza a resucitar
Empresas reactivan negocio que moverá $6.700 millones en préstamos en 2015
La industria de la construcción y venta de viviendas retoma el crecimiento, tras el periodo de reducción económica.
Los datos del mercado son halagüeños. Durante el primer trimestre del año, aumentó un 5% el número de metros cuadrados destinado a la edificación habitacional.
En el caso del crédito, el sistema bancario incrementó un 6,3% el dinero prestado, a enero pasado.
En total, hay $4.460 millones colocados en empréstitos para la adquisición de viviendas.
El sector de mayor crecimiento, en los últimos tres años, es el de condominios y apartamentos dirigidos, principalmente, a grupos con poder adquisitivo medio alto y alto.
Solo en 2010, el Instituto Nacional de Estadística y Censos reportó un aumento del 40% en el número de viviendas de este tipo ocupadas, al superar las 60 mil.
Estos resultados no son pasajeros. Las proyecciones auguran mejores tiempos a la industria.
La razón es que en el país hay un déficit habitacional que llegará a 212 mil unidades en 2015.
Los bonos de vivienda, dirigidos a los estratos bajos de la población, representarán solo un 7%.
El 80% de las adquisiciones futuras, estima el Ministerio de Vivienda, sería cubierto mediante créditos, impulsando el mercado a los $6.700 millones. Este monto significa más de 170 mil operaciones crediticias.
En el caso del subsidio estatal para la vivienda, en los próximos cuatro años, la inversión ascendería a $230 millones. Casi 16 mil familias contarían con vivienda propia, mediante este sistema.
El crecimiento de la oferta crediticia junto con la inversión estatal son los principales motores de recuperación para el sector.
Los bancos comerciales estatales son los principales responsables de la mejora, con la puesta en marcha de nuevos productos financieros.
El atractivo para la conquista de clientes es que la tasa para los préstamos, actualmente, es en promedio de un 10%. En el caso de las instituciones privadas ronda el 18%.
Las entidades públicas proyectan prestar, en 2011 casi $800 millones. Mucho de este dinero será dado a las clases media y media alta.
Las desarrolladoras confirman el repunte del sector. La preventa de los proyectos es más dinámica y los planes de ampliación continúan.
“Las colocaciones de viviendas han mejorado porque los bancos están más dinámicos, ofrecen tasas más bajas y los clientes tienen mayor disposición para comprar”, comenta Alejandra Baeza, gerente Comercial y Ventas Grupo Constructor Nueva Era.
El Valle Central concentra el mayor número de desarrollos. El Colegio Federado de Ingenieros y de Arquitectos reporta más dinamismo durante el primer trimestre en San José, Alajuela y Heredia.
Hogares de Costa Rica ejemplifica perfectamente estas características. En la capital desarrolla dos torres de apartamentos, un condominio y un edificio de oficinas. Mientras que en los otros dos sitios está con urbanizaciones.
“El país está urgido de medidas que ayuden a las personas de ingresos medios y bajos a tener su vivienda”, enfatiza Diana Escobar, gerente comercial de la compañía.
Precisamente es a este nicho al cual, desde hace un año, proyecta satisfacer Cementos Mexicanos (Cemex).
El modelo de esta compañía busca disminuir la carencia de viviendas en el país, pues utiliza una estructura de moldes de concreto de bajo costo.
Este método permite tener una casa construida en cuatro días. La firma edifica con esta metodología el proyecto La Campiña, en Cartago, que tiene el respaldo estatal.
Cemex ha invertido en estos desarrollos $140 millones en Latinoamérica. La empresa rechaza la creencia de que las clases bajas carecen de recursos para adquirir casa. “Una persona que busca una vivienda de interés social, las encuentra con un precio que va entre $25 mil y $30 mil y otras desde $120 mil. Las familias están en una posición complicada”, explica María José Velázquez, gerente de Vivienda Cemex Centroamérica.
El Grupo Roble también posee planes a bajo precio en El Salvador y Panamá.
En suelo salvadoreño tiene casas desde $15 mil, dirigidas a familias con ingresos mensuales de $365.
Para la clase media tiene viviendas con salida al mercado a partir de $65 mil. Por ahora, la compañía no tiene previsto realizar este tipo de trabajos en el país.
Las compañías del sector coinciden en que el mercado nacional tiene que diversificar los productos.
Con esta medida, reactivará no solo el negocio del ladrillo, sino que permitirá a miles de familias de ingresos medios acceder a
soluciones habitacionales.
Oscar Rodríguez
[email protected]