Más desempleo sería la consecuencia si no se toman medidas para recortar costo de combustibles

Un mayor desempleo o en el mejor de los casos una economía que no genera nuevos puestos de trabajo, pero que se mantiene estática, serían la consecuencia lógica de una escalada en los precios de los combustibles, advierten varios líderes empresariales.

Y es que al aumentar los precios de la gasolina, se frenaría cualquier intento de recuperación que hagan los sectores productivos.

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En estos momentos, más de 300 mil personas no tienen una fuente de empleo.

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Ante este panorama, solicitan al gobierno suspender el mecanismo de actualización del impuesto único a los combustibles por un año.

Asimismo, piden evaluar otras medidas como podrían ser aplicar un crédito fiscal al búnker y al GLP

El viernes de la semana pasada, Recope pidió un incremento en la gasolina súper de ¢87, lo cual, haría que el litro de este bien llegue a una cifra récord de ¢909. En el caso de la plus, el alza sería de ¢85.

“Apoyamos esta iniciativa, pero también estamos solicitando abrir una mesa de negociación urgente entre el Gobierno y el sector privado porque esta alza es muy difícil de paliar, sobre todo, porque los transportistas ya recibieron el impacto económico que ocasionó la pandemia a nivel mundial”, aseguró Francisco Quirós, presidente de la Cámara Nacional de Transportistas.

La otra medida que propone Carlos Alvarado es aplicar un crédito fiscal al impuesto sobre la renta por un monto de cada litro de gasolina o diésel consumido que beneficiaría solo a los sectores de transporte de carga, remunerado de personas (incluyendo taxis y autobuses) y a las actividades agrícolas.

El crédito fiscal en la liquidación del impuesto sobre la renta sería entre ¢78 para la gasolina y ¢92 para el diésel.

Los industriales solicitan que se incluyan otros combustibles como el búnker y el GLP, para beneficiar también a otros sectores, particularmente las pequeñas y medianas empresas, en actividades cómo restaurantes, sodas, comercios e industria alimentaria.

“¿Por qué no incluyen el búnker y el gas licuado de petróleo en este crédito fiscal que se usa en la producción industrial y el GLP también se une en miles de pequeños establecimientos de preparación y venta de comidas y que se vieron fuertemente afectados por la pandemia?”, aseguró Enrique Egloff, presidente de la Cámara de Industrias.

Suspender de manera transitoria el impuesto único a los combustibles debe hacerse mediante una reforma de ley, por lo que, se pide apoyo a los diputados para que lo aprueben.

“Para la Unión de Cámaras, debe ser una prioridad la discusión de esta propuesta debido a que es una medida para contener la escalada en los precios por el aumento internacional del petróleo, a fin de que los efectos para las familias costarricenses y para el sector productivo sean de menor impacto”, expresó José Álvaro Jenkins, presidente de Uccaep.

Los industriales mantienen sus dudas sobre otra posibilidad que se baraja en la palestra legislativa y es cambiar la metodología de fijación de tarifas por parte de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos, esto podría generar que a largo plazo se tengan consecuencias negativas sobre las finanzas de Recope, su flujo de caja y compromisos adquiridos, pero si se hace de manera temporal y puede aportar, sería aceptable.

Los sectores aducen que esta propuesta y la de congelar el impuesto único a los combustibles debe aprobarse de manera inmediata, sobre todo, porque todavía están viéndose afectados por la crisis logística y de precios de insumos y materias primas.