Luna Roja cautiva el paladar con su cocina costarricense moderna
Melvin Molina [email protected] | Viernes 29 julio, 2016
Una de las bondades del restaurante Luna Roja, en barrio Escalante, es la pasión con la que trabajan en reinterpretar la comida de Costa Rica y llevarla a un nivel de alta cocina.
Silvia Rodríguez, propietaria, es una apasionada por la tradición culinaria nacional, esa que se construye con la influencia de los primeros pobladores, los europeos, afrodescendientes y chinos, entre otros.
“Nosotros queremos ofrecer cocina costarricense moderna. Queremos reinventarla a partir de toda nuestra herencia. Sentimos que en el país hace falta promover aún más menús con identidad local”, explicó Rodríguez.
En la cocina del chef Pablo Vásquez se trabaja con productos locales, de preferencia orgánicos. Se acude a opciones importadas solo cuando la producción nacional no da abasto.
Un buen ejemplo de la propuesta de Luna Roja es su ensalada Trópico Tico.
“Es un platillo en el que mezclamos productos de diversas regiones y en el que la parte sensorial es importante. Sobre un espejo de salsa de maracuyá colocamos lechuga, un puré de palmito fresco, lonjas de tomate escaldado y aguacate criollo gratinado, esto lleva un marinado criollo con limón, semilla de culantro y chile panameño”, detalló el chef.
La salsa le da un color amarillo cautivador y al llevar una porción de cada capa de ingredientes a la boca se experimentan sensaciones diversas. Es uno de esos platos que hay que disfrutar pausado, de los que cautivan el paladar.
Un plato fuerte recomendado por Rodríguez es el lomito en salsa caribeña. Un trozo de carne nacional sobre una base de salsa de tomate natural, crema de coco con aromas caribeños del tomillo y el chile panameño.
Se acompaña de una ensalada de frijoles, arroz, pastel de plátano maduro con dulce de tapa, queso Bagaces y azúcar.
“Esperamos que al visitarnos los comensales se confronten con su identidad, su comida, con esos ingredientes que siempre hemos tenido en el jardín y desde luego que salgan con deseos de volver porque encontraron un pedacito de su propia identidad”, finalizó Rodríguez.