Luces y sombras
Arnoldo Mora [email protected] | Viernes 08 mayo, 2009


Luces y sombras

Partiendo de principios teológicos, Monseñor Barrantes dirige su mirada profética a la crítica realidad que vive el país preguntándose quiénes son sus principales víctimas. La respuesta no deja la menor duda: “Los grupos sociales más afectados se deben considerar: los desempleados, especialmente personas con menor escolaridad y capacitación; los empleados de zonas rurales donde el turismo se ha visto reducido y algunos grupos de agricultores”. Frente a esta ominosa realidad el prelado reacciona con los siguientes cuestionamientos: “Si se trata de salvar la economía y a los agentes económicos no se puede salvar solo al capital. ¿Solo se busca salvar a las empresas? ¿Pero qué pasa con todos los actores que se involucran ahí? Porque si se busca salvar las empresas eso quiere decir salvar a todas las personas que la integran”.
Para lograr ese objetivo el Arzobispo propone una serie de medidas concretas, la principal de las cuales la formula con esta propuesta: “En este momento considero impostergable un diálogo nacional”, que debe ser “constructivo para lograr los necesarios consensos nacionales”. En este diálogo deben participar en igualdad de condiciones todos los agentes sociales, que el documento enumera prolijamente. A continuación Monseñor se queja de que “no existe un proyecto nacional que oriente las acciones necesarias que hay que hacer en este momento”. Por eso insiste: “Necesitamos una estrategia integral” que solo se logrará “con la realización de un proceso de diálogo social” conducente a forjar un “proyecto país”, que debe tener como prioridad la distribución de las cargas de la crisis proporcionalmente, entre todos los actores sociales”. Luego es aún más explícito cuando dice: “En el proyecto país hay que buscar la protección específica de los actores sociales más desprotegidos. Por ejemplo, mantener los servicios e ingresos básicos a nivel familiar”. Finalmente, concluye recordando el principio básico de la doctrina social de la Iglesia: “Hay que insistir en la dimensión ética del trabajo”.
Por su parte, Arias se sintió aludido y reaccionó al día siguiente, no como un jefe de Estado auténticamente democrático, sino con una hepática diatriba que constituye una agresión personal a los jerarcas de la Iglesia. Nunca hubo en la historia de este país, que yo recuerde, un contraste mayor en un 1º de Mayo entre luces (Hugo Barrantes) y sombras (Oscar Arias). El pueblo y la historia los juzgarán.
NOTAS ANTERIORES

Prepárense para despegar
Viernes 25 abril, 2025
Las palabras del título las escuchamos siempre que tomamos un vuelo y seguido a eso vienen las reglas de seguridad

Percepciones sobre nuestra democracia
Viernes 25 abril, 2025
He leído recientemente en un serio estudio de opinión unas preguntas que han descrito claramente el meollo de lo nos afecta actualmente en nuestras percepciones

Ensayos breves
Jueves 24 abril, 2025
Dos años después de haber publicado mis Memorias en junio de 2023 el destino me llama nuevamente a dar a conocer un nuevo libro que he titulado de Ensayos

Rodrigo Arias Sánchez, su necesaria Presidencia Legislativa
Miércoles 23 abril, 2025
La derrota de Liberación Nacional, por segunda vez consecutiva no era novedosa. Ya había sucedido en 1998 y el 2002, cuando la Unidad Social Cristiana gobernó d