Limón recibirá $1 mil millones de APM Terminals
Esteban Arrieta [email protected] | Jueves 30 junio, 2016
Unos $1 mil millones se invertirían en Limón en los próximos 30 años, gracias a la entrada en operación de la Terminal de Contenedores de Moín (TCM).
El dinero es parte de un canon que deberá pagar la concesionaria APM Terminals por operar el megapuerto a partir de 2018.
En principio, el dinero será administrado por Japdeva a través de un fideicomiso con el Banco Nacional y serviría para atender múltiples necesidades de la provincia caribeña.
El dinero alcanzaría de sobra para construir un nuevo hospital regional por $55 millones, o bien, financiar una nueva marina por $10 millones.
Asimismo, se podría construir una zona franca industrial en el Caribe, así como un parque tecnológico, una planta de biodiésel y etanol, y pagar el programa de la cuenca binacional del río Sixaola, entre otras obras.
Se estima que para el primer año de operación de la TCM, Japdeva obtendrá unos $12 millones como parte del impuesto y para 2045, habrá recibido $986 millones.
Sobre este tema se trató de conversar con Ann Mckinley, presidenta ejecutiva de Japdeva, pero prefirió no opinar hasta mañana, cuando se den a conocer los detalles del fideicomiso con el Banco Nacional.
Mientras tanto, los limonenses tienen grandes expectativas de lo que significaría la entrada en operación de la TCM.{l1}japdeva_apuesta_a_buques_mixtos_y_trasbordo_para_sobrevivir{/l1}
“Japdeva tiene una oportunidad de oro para fomentar el desarrollo en el Caribe, a través de diferentes proyectos, como la universalización de la enseñanza del inglés a toda la población o el proyecto de Limón Home Port, para crear una marina y atraer cruceros. La gran apuesta debe ser turismo”, dijo Randy Gordon, secretario de la Cámara de Comercio y Turismo de Limón.
La proyección de la riqueza que se derramará en el Caribe en las próximas tres décadas no contempla las actividades indirectas que se generarían gracias a la TCM, por lo que a final de cuentas, esa cifra se superaría por mucho, señala el Estudio de Impacto Socioeconómico de la Terminal de Contenedores Moín, realizado por la Academia de Centroamérica.
Aunque en principio uno de los principales objetivos de Japdeva es promover el desarrollo económico de la vertiente Atlántica, desde hace años esa institución dejó de ayudar económicamente a las comunidades de Limón.
Entre 2008 y 2014, apenas repartió unos ¢11 millones entre las seis municipalidades caribeñas y asociaciones de desarrollo, a pesar de que por ley está obligada a girar un 10% de su presupuesto anual.
Si la ley se hubiera aplicado en toda su extensión, al menos ¢23 mil millones se habrían invertido en la provincia para reparación de caminos, mejoramiento de alumbrado público, seguridad y mantenimiento de instalaciones deportivas, entre otras labores comunales.
La última vez que Japdeva hizo un aporte considerable a la provincia de Limón fue en 2007, cuando giró ¢713 millones.
Por el contrario, mientras el aporte de esa institución al Caribe se vino a pique, el rubro de remuneraciones se ha duplicado prácticamente en ese mismo periodo, a tal punto que ya representa un 70% de los ingresos que recibe.