La última lección
Nuria Marín [email protected] | Lunes 13 abril, 2009
La última lección
Nuria Marín
La Universidad Carnegie Mellon tiene un programa en el que profesores imparten conferencias asumiendo que es la última de su vida. En el caso de Randy Pausch, se trataba de un ejercicio real, desahuciado por un cáncer pancreático, tenía pocos meses por vivir.Participar le significaba un verdadero dilema. La preparación demandaría esfuerzo y le robaría precioso tiempo a la familia y sus esfuerzos por alivianar la difícil carga a la mujer de sus sueños, Jai. Por otra parte, se le hacía difícil renunciar a este último reto profesional.
Al final, siguiendo un pilar de su vida, “no puedes cambiar las cartas que depara la vida, pero sí puedes decidir cómo jugar la partida”, convirtió su última lección en una gran oportunidad.
Preocupado por sus pequeños hijos Logan, Chloe y Dylan, dos de los cuales por su corta edad difícilmente le recordarán, la charla representaba la doble oportunidad de conocer a su padre en acción y a él como padre la de poder condensarles años de consejos y sabiduría en escasos 90 minutos.
Su disertación, “Alcanzando verdaderamente tus sueños de niñez”, es una elocuente y conmovedora enseñanza de vida, que le dio la vuelta al mundo gracias a youtube (www.thelastlecture.com). Tiene aún mayor valor si se acompaña con la lectura de su libro, “La última lección”.
En un jovial y entretenido recorrido por su vida, nos narra cómo pudo concretar muchos de sus sueños: superar las negativas de la NASA y experimentar un ambiente de gravedad cero, ser publicado en la enciclopedia World Book, o ganar premios en ferias.
También logró convertirse en un “Disney Imagineer”, superando las conservadoras barreras de la universidad, y el recelo de Disney, para que aceptaran que seis meses de trabajo de un “profesor” valieran como sabático académico.
No logró convertirse en el héroe de su infancia, pero logró que este William Shatner (capitán Kirk de la nave Enterprise), visitara su laboratorio de realidad virtual y se convirtiera en amigo personal. Nunca llegó a jugar en la NFL, pero aprendió de su entrenador Graham lecciones que le permitirían ser mejor padre, profesor y persona.
Como buen educador, su conferencia es rica en sabiduría incluso a veces inadvertida. Es generoso en imágenes e historias plenas en integridad, valores y heroísmos que se convierten para la audiencia en irresistibles invitaciones a emular.
Su intención es enseñarnos sobre la importancia de vivir, soñar y aspirar. De vivir con verdadera pasión y perseverar en nuestras metas. La importancia incluso de apreciar los obstáculos pues estos nos brindan la oportunidad de conocer el alcance de nuestros deseos y la voluntad para hacerlos posibles.
En un recorrido hacia lo importante: honor, gratitud, integridad y generosidad. Su última gran lección: si nos desempeñamos en la vida de la manera correcta, la vida misma se encargará de hacer nuestros sueños realidad.
Randy falleció en julio de 2008. En su batalla nos legó un verdadero canto a la vida.
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