La responsabilidad de la lengua
Candilejas [email protected] | Viernes 21 febrero, 2020
De nuestra lengua, el idioma español, se ha dicho que está en el tercer lugar después del francés y el italiano, entre los 10 más “sexis” del mundo.
Esto según una encuesta realizada por la cadena estadounidense CNN.
Pero además de este dato, que algunas personas pueden considerar importante y otras sin relevancia, es el idioma que más crece en el mundo, según un informe del Instituto Cervantes, titulado “El español, una lengua viva” (2018).
“El español es la segunda lengua materna del mundo por número de hablantes, tras el chino mandarín, y también la segunda lengua en un cómputo global de hablantes (dominio nativo + competencia limitada + estudiantes de español).
Por razones demográficas, el porcentaje de población mundial que habla español como lengua nativa está aumentando, mientras que la proporción de hablantes de chino e inglés desciende”, asegura dicho informe.
Ya a finales de 2018 éramos 577 millones los hablantes en español y el mismo es lengua oficial en 21 países.
Si tomamos en cuenta que el idioma es el rasgo más importante de una cultura, veremos enseguida la importancia de cuidar el nuestro.
Históricamente, por causa del uso popular de la gente que habla español, este adquiere nuevas palabras y otras quedan en desuso.
Otro fenómeno es el que ocurre cuando la gente toma alguna palabra extranjera y comienza a utilizarla para decir algo diferente a lo que en realidad quiere decir ese término. Modifican la palabra y le dan otro uso.
Sin embargo, en la actualidad los grandes cambios que las modernas tecnologías producen en la forma de comunicarnos, agregan un nuevo factor que podría perjudicar al español.
Una toma de conciencia sobre esto, podría hacernos más cuidadosos en el uso del idioma, aún si se trate de la comunicación por teléfonos celulares o redes sociales, en cuanto a la acentuación de las palabras y su ortografía.
“Deberíamos escribir mejor, cuidar más el idioma. Ahora incluso nos confiamos en que la computadora es la que hace las correcciones ortográficas” dice la filóloga Mauren Chaves Carpio, quién tiene una maestría en docencia.
El idioma es un ente vivo, pero tiene que haber elementos en común para que siempre podamos entendernos, quienes hablamos español en el mundo, según lo explica esta docente.
El español es “la segunda lengua más hablada del mundo”, ha explicado Juan Manuel Bonet. Director del Instituto Cervantes.
Y aunque se encuentra “en expansión” y goza de buena salud, esta lengua debe ser estimulada frente a la “dura competencia” de las otras grandes lenguas que buscan posicionarse en el mundo, según lo cree Richard Bueno Hudson, director académico del Instituto Cervantes.
“Se han difuminado barreras geográficas y hay que adaptarse, siempre sin perder de vista la calidad”, dice Richard Bueno, a quien le preocupa la “metamorfosis de internet”.
Por otro lado, un debate se produce actualmente, en especial en América Latina, relacionado con el hecho de que las mujeres en lucha feminista, reclaman “una lengua inclusiva”, que dé visibilidad a las mujeres, porque consideran que existe una desigualdad en ella.
“Es verdad que esa desigualdad existe, que hay que luchar por la igualdad con todos los medios que se pueda, y si el lenguaje es una herramienta, pues también a través del lenguaje", explica Santiago Muñoz, presidente de la Real Academia Española de la Lengua.
En todo caso, lo innegable es que el español es un idioma vivo y en evolución, condición indispensable para que no decrezca ni desaparezca, sino todo lo contrario.
Y que la tarea de cuidar nuestro idioma nos atañe a todos, para vigilar su crecimiento saludable y mantenerlo agradable o “sexi”, como algunos lo han calificado.
Carmen Juncos Biasutto y Ricardo Sossa Ortiz
Editores jefes y Directores de proyectos