La inclusión de género como motor de desarrollo comercial
Julie Paise [email protected] | Lunes 17 abril, 2023
La inclusión de género dejó de ser una opción para las empresas y hoy día existe un mayor interés por seguir avanzando en temas como liderazgo y talento, igualdad y paridad salarial, políticas contra el acoso sexual, cultura inclusiva y hasta la imagen de marca.
Muestra de ello es que para este 2023, más de 500 empresas a nivel global participaron en el Índice de Igualdad de Género de Bloomberg (GEI, por sus siglas en inglés), que se ha convertido en un referente en materia de inclusión de género y una herramienta para desarrollar políticas de diversidad, que no solo contribuyan a cerrar la brecha sino que se traduzcan en un mayor rendimiento de las empresas.
Este año, resulta interesante el crecimiento de la divulgación de datos relacionados con el género en el GEI, por parte de empresas latinoamericanas, ya no solo del área de finanzas, como era lo usual, sino que podemos encontrar una amplia variedad que incluye a sectores de energía, comunicaciones, sanitario, industrial, inmobiliario y comercial, entre otros. Además, el 64% de compañías encuestadas han implementado objetivos de diversidad e inclusión para los directivos en las evaluaciones de desempeño, un aumento de 8 puntos con respecto al año pasado. Es decir, es parte central de la estrategia de estas organizaciones y, por ende, es medido.
Es alentador para una región tan amplia y diversa como América Latina que, además de desafíos, cuenta con muchísimas oportunidades donde las mujeres podemos continuar creciendo, pues hay cada vez mayor consciencia acerca de la relevancia de la igualdad de género y su impacto en las comunidades.
Entre otras razones, resulta prometedor pues en sectores como el comercial, en América Latina, donde hasta hace tan solo 5 años se trataba de un territorio prácticamente de hombres, hoy cada vez son más las mujeres que tienen un rol relevante allí, pues, aparte de que se lo han ganado, se han abierto una serie de oportunidades y condiciones para su desarrollo profesional.
Desde mi posición en Philip Morris, continuaré reforzando el compromiso de la compañía con seguir brindando igualdad de oportunidades, apuntando a seguir construyendo una cultura inclusiva, tanto dentro de nuestra empresa, pero también fuera de ella. Históricamente, se solía medir el progreso en términos de diversidad e inclusión de género principalmente a partir de la cuota de representación femenina. Esto no representaba la complejidad de los distintos aspectos de la inclusión, ni su impacto en las comunidades, por ejemplo.
Para generar un verdadero impacto, las organizaciones deben ser capaces de medir, más allá de sus cuotas de representación y entender el funcionamiento de las comunidades, así como la evolución cultural dentro de la propia organización. A partir de allí, varios indicadores comenzarán a moverse, ojalá positivamente, entre los que -por supuesto- está la representación por género, pero también otros de relevancia. Es decir, la diversidad e inclusión serán una consecuencia de hacer las cosas mejor y no un fin en sí mismo.
Julie Paise, Managing Director Philip Morris CARICAM