La importancia de la honradez financiera

Daniel Suchar Zomer, PhD

Analista Financiero. Profesor Universitario.

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La educación financiera es un tema que toca la fibra de la sociedad moderna y en Costa Rica, no es la excepción.

La capacidad de gestionar las finanzas personales es esencial para vivir una vida plena y libre de preocupaciones económicas. Sin embargo, en muchos casos, se pasa por alto un principio fundamental: la honradez financiera a todo nivel !!!

Una de las lecciones más valiosas que se aprende en el camino hacia la educación financiera es la importancia de no gastar más de lo que ingresa. Esta simple regla de oro es el cimiento de una salud financiera sólida.

Cuando se gasta más de lo que se percibe, se acumulan deudas que pueden ser difíciles de pagar, lo que atrapa al individuo en un ciclo de estrés y preocupación. Para evitar este escenario, es fundamental llevar un registro honrado y sincero, de todos los ingresos y gastos, establecer un presupuesto realista y, sobre todo, vivir dentro de las posibilidades.

Priorizar los gastos es crucial; es importante cubrir las necesidades básicas, como vivienda, alimentos y servicios públicos, antes de gastar en lujos o entretenimiento, por citar ejemplos del diario vivir.

Asimismo, es recomendable establecer un fondo de emergencia que cubra al menos tres meses de gastos básicos. Esto proporciona un colchón financiero en caso de situaciones inesperadas, como una pérdida de empleo o gastos médicos inesperados.

Además, considera la posibilidad de destinar una parte de los ingresos mensuales al ahorro e inversión a largo plazo, como fondos de retiro o inversiones en el mercado financiero. Automatizar los ahorros es una estrategia efectiva para asegurar de que siempre se está ahorrando una parte de dichos ingresos.

El manejo de créditos, especialmente las tarjetas de crédito, es un área crítica para mantener una salud financiera sólida. En primer lugar, utilizar el crédito con responsabilidad y solo cuando sea necesario. No caer en la tentación de acumular deudas innecesarias o utilizar tarjetas de crédito para financiar un estilo de vida que no puedes mantener. Pagar las tarjetas de crédito en su totalidad y a tiempo cada mes para evitar cargos por intereses y mantener un historial de crédito positivo.

Por otro lado, es importante establecer un límite en la cantidad de crédito que se utiliza y no excederlo. Esto garantiza que se pueda manejar las deudas de manera efectiva y evita la acumulación de deudas excesivas. Si se tiene deudas acumuladas, elaborar un plan para pagarlas gradualmente, priorizando las deudas con tasas de interés más altas. Explorar opciones de consolidación de deudas si es necesario.

La honradez financiera no solo implica evitar la acumulación de deudas; también se trata de ser transparentes y sinceros con el grupo afectivo cercano acerca de la situación financiera actual. La salud financiera abarca aspectos como el ahorro, la inversión, la planificación para el retiro y la gestión adecuada de los riesgos financieros, donde pareciera un tabú hablar de ello.

Para fortalecer dicha salud financiera, es necesario buscar la orientación de expertos en el campo de las finanzas personales. Los asesores financieros debidamente acreditados profesionalmente (No “TikTokers wanna Be”) y planificadores pueden proporcionar valiosos conocimientos y estrategias para optimizar las finanzas y garantizar un futuro económico más seguro. Los expertos en finanzas personales, autores de libros, blogs y programas de radio y televisión ofrecen consejos valiosos sobre cómo administrar el dinero de manera efectiva.

La tecnología también ha democratizado la inversión, lo que permite a las personas de todas las edades y antecedentes acceder a plataformas de inversión en línea. Aquí es donde se puede aprovechar bastamente estos recursos y consultar a dichos expertos para tomar decisiones financieras más informadas y de menor riesgo posible.

Es comprensible que algunas personas hayan tenido malas experiencias financieras en el pasado. La deuda excesiva, la falta de ahorro o las inversiones fallidas pueden dejar cicatrices emocionales y financieras a todo nivel. De hecho, no es cuestión de “Clases Sociales”, sino más bien, de falta de implementación de la propia Educación Financiera personal.

Sin embargo, la buena noticia es que siempre es posible empezar de nuevo. La educación financiera no tiene una fecha de vencimiento, y cada día es una oportunidad para aprender y mejorar. Se puede dejar atrás las malas experiencias y abrazar el hecho de que se puede tomar el control de las finanzas personales desde este momento. Eso sí, con VOLUNTAD PERSONAL de querer escuchar y mejorar en cada quien.

La honradez financiera es esencial para la estabilidad económica y bienestar general. Hay que recordar que cada persona tiene el poder de tomar decisiones financieras informadas y que el camino hacia la educación financiera comienza con un paso. ¡El momento de empezar es ahora!