Hoteleros critican competencia desleal de apps de hostelería
Luis Fernando Cascante [email protected] | Jueves 27 agosto, 2015 12:00 a. m.
Airbnb tiene más de 5 mil propiedades inscritas en Costa Rica
Hoteleros critican competencia desleal de 'apps' de hostelería
La mayoría no pagan impuestos ni aseguran a sus empleados, afirma Gustavo Araya, presidente de la Cámara de Hoteles
No solo los taxistas se quejan de la competencia desleal que trae la irrupción de servicios como Uber, popular servicio que conecta a conductores y pasajeros a través de una aplicación de smartphone.
Los hoteleros llevan varios años luchando contra servicios como Airbnb, Vrbo, Roomorama, Windu y 9 Flats, que ofrecen un portafolio de casas para alojar turistas.
Estos sitios le permiten a quienes sean parte de su comunidad, inscribirse como anfitriones para hospedar personas en su propio hogar y así generar un ingreso.
Por la intermediación y el enlace con turistas, la empresa cobra un porcentaje en cada reserva o transacción que se realice entre las partes.
En el país se registran más de 8 mil aposentos, distribuidos en estas plataformas, según datos de la Cámara de Hoteles.
Solo en Airbnb se encuentran registradas 5.500 propiedades, de acuerdo con Stephanie Camargo, gerente de Comunicación de Airbnb para Latinoamérica.
“Aquí el problema no es que operen, es un tema de impuestos. Estamos preocupados de que esto va a crecer y parece inevitable que crezca en las condiciones desleales que lo está haciendo. Es mucho más barato y al consumidor le gusta”, comentó Gustavo Araya, presidente de la Cámara de Hoteles.
Araya afirmó que, al tratarse de una actividad comercial, quienes lucren con el hospedaje de turistas deben pagar impuestos, tener patente comercial, riesgo laboral del INS y registrar a sus trabajadores ante la Caja. “La mayoría no pagan impuestos y no aseguran a sus empleados”, agregó.
En Airbnb consideran que las regulaciones a este servicio no deben ser las mismas que se aplican a otras empresas como hosteles y hoteles, por tratarse de un “nuevo modelo de negocios”.
“Puede tomar tiempo comprender en su totalidad cómo funciona Airbnb y no siempre es apropiado o fácil aplicar las mismas regulaciones que fueron creadas para servicios de hospitalidad tradicional”, comentó Camargo.
Por su parte, Hermes Navarro, jefe de atracción de inversiones del ICT, asegura que se ha coordinado con Tributación Directa para fiscalizar estos negocios.
“Primero se ha buscado en los sitios web y ahí se encuentra dónde es que operan. Luego se hace una inspección para asegurar que cumplan con los requerimientos para operar”, comentó Navarro, quien considera innecesaria la creación de un nuevo marco legal para regular a estas empresas.
La cantidad de propiedades inscritas en estos sitios abarca el 17% de la oferta hotelera nacional, según datos de la Cámara de Hoteles.
¿Cómo funciona?
La mayoría de estos servicios funcionan como una plataforma tecnológica que conecta a turistas y anfitriones.
Las personas se suscriben a la comunidad y negocian entre pares las condiciones de alojamiento. Por ofrecer la plataforma en donde se da la transacción y el enlace, por ejemplo, Airbnb cobra un 3% del costo de la reservación a los anfitriones, mientras que los huéspedes pagan al sitio una cuota entre el 6% y 12% del costo de la reserva.
Luis Fernando Cascante