Escasez mundial de microchips ahora golpea al sector automotor

A pesar de que la vacunación contra la Covid-19 avanza en todo el mundo, el regreso a la normalidad sigue tomando tiempo y cobrando la factura casi dos años después del inicio de la pandemia.

Y es que a pesar de que fabricantes como Samsung Electronics, NXP Semiconductors, TSMC y Toshiba están supliendo la demanda para la fabricación de celulares inteligentes, tabletas y computadoras, la reactivación del sector automotor quedó rezagada.

Según Toshiba, no hay un futuro próximo alentador, ya que, si bien la mayoría de compañías están retomando sus líneas de producción de forma progresiva, los microchips se limitan a la cantidad de unidades producidas y las compañías no dan abasto.

El director de una de las plantas de semiconductores de Toshiba dio a conocer que hay un gran cúmulo de pedidos retrasados debido a la escasez de material y a el aumento en la demanda que se estima se extienda hasta septiembre del próximo año.

Para enfrentar este problema, la firma planea invertir $545 millones en los próximos tres años para impulsar la producción de semiconductores y así abastecer a las industrias afectadas.

Hay varias marcas que se han visto obligadas a pausar o disminuir su producción a causa de esta crisis, en el caso de Latinoamérica algunas de ellas son Toyota, Renault, Hyundai, Volkswagen, ocasionado incluso escasez de algunos modelos populares.

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“La escasez global de microchips unida a la de los contenedores es lo único que "se interpone en el camino de Tesla para mantener un crecimiento de ventas superior al 50%", indicó por su parte el director ejecutivo de la compañía, Elon Musk.

General Motors y Ford son otros fabricantes estadounidenses que se han visto obligados a suspender la producción de algunos modelos por la escasez de microchips.

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Se estima que este fenómeno le costará al sector automotriz unos $210 mil millones este año y provocará que se produzcan casi 8 millones de vehículos menos de lo previsto de acuerdo con AlixPartners.