En la ruta final del Monstruo no hay espinas
Gaetano Pandolfo [email protected] | Jueves 09 noviembre, 2023
Desde que tengo uso de razón y asisto al estadio a dar cobertura a los juegos de la Selección Nacional de los últimos años, he notado que Joel Campbell tiene dos costumbres muy bien arraigadas.
Jugar con el número 12 en su uniforme y cuando la Tricolor entra al terreno de juego, siempre ocupa el último lugar de la “fila india”. Debe ser una cábala del cotizado futbolista.
Enterados de antemano que los fanáticos del Monstruo le tenían al nuevo fichaje del León un recibimiento “especial”, molestos por su cambio de uniforme, nos extrañó que un grueso sector de la prensa deportiva nacional, hiciera un “pequeñito” escándalo y resaltara que Joel, como parte del show, entró de último a la cancha, como adrede para recibir, aislado del resto de la nómina manuda, la rechifla del siglo.
Nada que ver, Campbell entró de último, como lo acostumbra y no lo hizo para separarse de sus compañeros y escuchar la quinta sinfonía de Beethoven, aislado y alejado de su grupo.
La frenética barra morada hizo de forma perfecta su trabajo de “molestar” a Joel y el futbolista en la cancha, hizo también su acostumbrado trabajo y fue figura del equipo erizo.
El triunfo del Saprissa, gracias al golazo de Fidel Escobar, puso a la nómina de Vladimir Quesada en ruta directa a conquistar el primer lugar de la clasificación general y con ello asegurarse la final por el título, en caso de no ganar la etapa de semifinales. Con esa sonada victoria en el clásico, las huestes del siempre sereno técnico del Saprissa, se ponen más cerca del tricampeonato, porque si bien es cierto, los partidos para ganarlos primero hay que jugarlos, el calendario del Apertura resultó benévolo para los bicampeones nacionales en su cierre.
Al Monstruo le restan cuatro partidos y ninguno es contra equipos metidos en zona de clasificación. Todo lo contrario, enfrenta a rivales de la zona baja de la tabla, incluyendo a Pérez Zeledón y a Grecia, penúltimo y último lugar de la clasificación respectivamente.
Saprissa juega hoy en Liberia, quizá al partido más complicado de esta ruta final y cierra con visita a Guápiles, para medirse con el Santos de Randall Row, otro rival incómodo. Sinceramente, quizá solo a acérrimos fanáticos de la Liga, se les puede ocurrir que los morados pueden dejen escapar la ventaja de cuatro puntos que le llevan al León, en este sendero repleto de rosas y con pocas espinas.