Dos encuestadoras pasaron la prueba
Esteban Arrieta [email protected] | Viernes 09 febrero, 2018
Cuatro años después del fracaso de las encuestas en la campaña electoral, la empresa Opol Consultores y el Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP) de la UCR, registraron con precisión el éxito de los candidatos que avanzaron a la segunda ronda.
Asimismo, antes de la veda electoral —fijada cuatro días antes de las elecciones—, las mediciones dejaron claro que Antonio Álvarez, de Liberación Nacional, estaba en peligro de no avanzar y que Juan Diego Castro del PIN se desinflabla aceleradamente.
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No obstante, entre las dos encuestadoras la que ofreció datos más certeros fue Opol Consultores, ya que se acercó mucho más a los resultados finales.
La empresa hizo seis estudios durante enero, mediante el método de simulación de voto en todo el país y no por medio de teléfono como la UCR.
El margen de error fue del 1,5% para la última publicación —31 de enero— y la cantidad de indecisos rondaba el 17% de los electores para ese momento.
“El tema de las tendencias en todas las encuestas fue claro a partir de enero, tras la opinión consultiva de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en torno al matrimonio gay, cuando se registró un ascenso muy importante de Fabricio Alvarado, de Restauración Nacional, en primera instancia y una semana después, el de Carlos Alvarado del PAC”, dijo Mauricio Muñoz, vocero de la empresa Opol Consultores.
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En ese sentido, la cantidad de votos que al final obtuvo Fabricio estuvo dentro del margen de error de la última encuesta, mientras que en el caso del PAC, erró por un 2%, incluyendo dicha variable estadística.
Durante la campaña Opol Consultores fue motivo de una denuncia ante el Tribunal Supremo de Elecciones, por parte del PAC; sin embargo, otras encuestadoras como Demoscopía, CID Gallup y hasta el CIEP-UCR le daban muy pocas oportunidades al candidato rojiamarillo en el momento del reclamo.
Una vez que se puso sobre la mesa de debate el matrimonio gay y la agenda LGTBI, el joven aspirante repuntó en las encuestas.
Para la campaña de 2014, otras empresas encuestadoras —Opol aún no existía— fallaron en predecir el ascenso de Luis Guillermo Solís y tampoco dejaron claro una tendencia en ese sentido.
Esto hizo que en torno al tema de las encuestas, hubiera mucha suspicacia para este proceso.
Para la elección 2018, el CIEP-UCR hizo dos encuestas mediante el método de llamadas telefónicas a líneas celulares.
El margen de error fue del 2,8% y se usaron dos estudios independientes: una encuesta aleatoria y una encuesta tipo panel.
Al comparar las encuestas con las votaciones, la UCR falló en cinco puntos porcentuales —incluyendo el margen de error— en predecir la victoria de Fabricio, mientras que en el caso del aspirante del PAC, la diferencia fue de siete puntos porcentuales, siempre incluyendo la variable del margen.
Sobre este tema, Felipe Alpízar, director del CIEP-UCR, se refirió a la importancia de la realización de encuestas en el proceso electoral.
"Nuestra intención es estudiar el contexto político actual con la mayor y mejor variedad de herramientas metodológicas posibles. De esta forma pretendemos cumplir con el mandato universitario de brindar a la ciudadanía el conocimiento que permita comprender la sociedad en que vivimos", aseveró Felipe Alpízar, director del CIEP-UCR.