Desplome de bolsas mundiales tras cierre de negociación en China
Bloomberg | Martes 05 enero, 2016
Los mercados financieros han comenzado el 2016 con mal pie, y las miradas están puestas en China.
Las bolsas de todo el mundo se desplomaron y los mercados emergentes registraron las pérdidas más importantes desde agosto tras la publicación del dato de manufactura de China, que provocó una venta masiva por parte de los inversores y llevó al cierre adelantado de la negociación en Shanghái.
Las divisas asiáticas junto con los mercados de metales y de crédito se debilitaron. Por su parte, los bonos y el yen subieron con fuerza por el aumento de la demanda de activos refugio.
El crudo Brent llegó a aumentar un 3,3% tras la ruptura de relaciones diplomáticas de Arabia Saudí y Bahréin con Irán.
“Es un comienzo de año muy feo”, dijo Peter Kinsella, analista jefe de divisas de Commerzbank en Londres. “Puede que sea Año Nuevo, pero los viejos problemas persisten. La preocupación por el crecimiento de China no se ha disipado”.
El desplome de los países emergentes supone la vuelta atrás a la inestabilidad financiera del pasado agosto, propiciada por la devaluación del yuan.
El ritmo de crecimiento de la segunda economía del mundo seguirá siendo un factor clave para los mercados en 2016 tras la caída de los mercados emergentes y de los precios de las materias primas por el enfriamiento de la economía asiática en 2015.
El índice manufacturero de Caixin arañó los 48,2 en diciembre, por debajo de la mediana de las estimaciones de analistas de 48,9 en un sondeo de Bloomberg, según el primer informe económico oficial del 1º de enero 2016, que mostró un debilitamiento de la producción industrial por quinto mes consecutivo, el período más largo desde 2009.
El índice de todos los países MSCI All-Country World cayó 2,9%, la mayor declinación desde el 24 de agosto cuando China devaluó inesperadamente el yuan. Los índices de referencia de Corea del Sur, Taiwán, Malasia, Sudáfrica y Polonia perdieron más de 2% este lunes.
La negociación en China se suspendió de acuerdo a la nueva normativa acordada el mes pasado por la que un movimiento del 5% en el indicador CSI 300 paraliza la negociación de acciones, opciones y futuros de índices durante 15 minutos.
Si el movimiento es del 7%, se procede al cierre de la negociación ese día. Tras la primera suspensión de la negociación solo se tardó siete minutos en llegar a la segunda parada, según datos compilados por Bloomberg.
El índice Shanghai Composite perdió un 6,9%, mientras que el indicador de empresas chinas Hang Seng de Hong Kong retrocedía un 3,6%, encaminándose a su mayor pérdida desde agosto.
La negociación de yuan en mercados extranjeros cayó a un mínimo de cinco años por las expectativas de que el banco central chino devaluará más la moneda para impulsar la economía asiática.
El won surcoreano perdió un 1,3% desde el 31 de diciembre, arrastrando un indicador de 20 divisas de países emergentes un 0,5% al nivel más bajo en un cierre.
Las acciones en el Golfo también registraron pérdidas por la escalada de tensión entre Irán y Arabia Saudí. El índice de Bloomberg GCC 200 retrocedió un 1%. Las acciones en Dubái y Qatar cayeron más de 1% mientras que el índice Tadawul All Share de Arabia Saudí retrocedió un 2,4%.
“Nunca es bueno ver que esto pasa el primer día de negociación”, dijo Patrick Spencer, vicepresidente de renta variable de Robert W. Baird en Londres.
“La volatilidad continuará dominando el mercado este año. Está la preocupación por la escaldada de tensiones en Oriente Medio, y el dato de manufactura en China también preocupa a los mercados”.