Narcotráfico y desempleo alimentan inseguridad
Delitos violentos no bajan desde hace cinco años
Ola de homicidios de las últimas semanas se debe a uso de recurso policial en atención de huelgas, según Gobierno
Jeffry Garza [email protected] | Viernes 13 septiembre, 2019
Quizá usted tiene la percepción de que es peligroso ir a cenar, salir a hacer ejercicio o simplemente pasar por algún lugar sin importar la hora, y la verdad es que podría tener razón.
La combinación de factores como el narcotráfico y el creciente desempleo es clave en el aumento de los delitos violentos en el país, los cuales se mantienen en una cifra constante desde 2014, según Álvaro Ramos, exministro de Seguridad.
En las últimas dos semanas, la inseguridad que viven los costarricenses se puso de manifiesto con 44 homicidios reportados.
El año pasado, se contabilizaron 18 mil delitos violentos; mientras que en 2015, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) contabilizó 15 mil casos.
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Las cifras se obtienen al sumar asaltos, asaltos a vivienda, homicidios dolosos y robo de vehículos mediante asalto, de acuerdo con las memorias anuales del OIJ desde 2014.
Se excluyen hurtos, robos de vehículo y robos a vivienda que no impliquen un enfrentamiento violento entre el delincuente y la víctima.
Como factor positivo, destaca que entre 2017 y 2018 hubo 18 homicidios menos; y en lo que va de este año, la cifra es de 33 asesinatos menos, si se compara con los primeros seis meses del año precedente.
Incluso, se estima que el 2019 cerrará con menos homicidios que el 2018, cuando se registraron 585 asesinatos, de acuerdo con el Ministerio de Seguridad.
La falta de éxito en la reducción de los hechos violentos reside en el crecimiento del trasiego de drogas hacia México, utilizando Costa Rica como centro de operaciones, explicó Ramos.
En relación con el desempleo, este se aprovecha en las zonas vulnerables para reclutar individuos que se dediquen al tráfico y a la venta de drogas, que deriva en otro tipo de delitos violentos como asaltos y homicidios.
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Sin embargo, el aumento de la población y los bienes, así como el número de denuncias año tras año, son las razones de mayor peso en el aumento de los delitos violentos, explicó Orlando Corrales, jefe de la Unidad de Análisis Criminal del OIJ.
Mientras que en 2017 se reportaron 98 mil denuncias, en 2018 fueron 103 mil.
En el caso de la ola de violencia, la recomposición de las organizaciones criminales siempre implica enfrentamientos entre bandas difíciles de controlar por la policía.
Destinar policías para la atención de huelgas en las últimas semanas también pudo influir, dijo, por su parte, Michael Soto, ministro de Seguridad, para referirse a la cantidad de asesinatos de los últimos días.
PREOCUPANTE
Ola de violencia tiene diversos factores.
Orlando Corrales
Unidad de Análisis
OIJ
Es importante señalar que hay una tendencia a la alza de las denuncias año tras año, por lo que evidentemente algunos indicadores van a dispararse. Hay que tomar en cuenta también el crecimiento poblacional y el de la infraestructura y bienes, que conducen a un crecimiento natural de los casos. Creo que un aumento entre un 3% y un 4% no es tan dramático.
Álvaro Ramos
Exministro
Seguridad
La mitad de los asesinatos violentos en los últimos años ha sido producto de enfrentamientos entre estructuras criminales, de por medio está el narcotráfico, y eso es prácticamente imposible de contener por parte de las autoridades. El problema es que si dejamos que sigan escalando esta violencia y los grupos narcotraficantes, podremos llegar a los niveles del Norte de Centroamérica, donde el control territorial de las bandas es muy violento.
Roberto Thompson
Diputado
Liberación Nacional
El Gobierno que ha tenido un manejo deficiente de la seguridad, tanto en la parte preventiva como la penal. Hace falta poner énfasis en la prevención, donde por ejemplo el gobierno de doña Laura Chinchilla fue muy exitoso y, por supuesto, entendemos que estos niveles tan altos de inseguridad tienen que ver también con el crecimiento del crimen organizado.
EN ALZA
Los delitos violentos no muestran un reducción significativa en cinco años; al contrario, se dispararon el año pasado, según cifras del Organismo de Investigación Judicial (cifras en miles).